A los ojos

Sé que temes verme a los ojos
Y te produce incertidumbre mi mirada,
Hay secretos brillando en su interior
Y hay respuestas relampagueando en su superficie,
Hay palabras que mudas se expresan
Silencios que dicen tanto sin un solo eco
Más pocos curiosos exploran su contenido
Aún menos descubren sus gritos de anhelos…

Mírame fijo, no tengas miedo
No pensaré mal de ti, ni iras al infierno,
Vamos, mírame, que yo no muerdo,
Atrévete a explorar en estos ojos marrones
La profundidad oculta de un mar y un cielo,
Sé que te asusta la mueca de una sonrisa,
Sé que temes enfrentar el desconcierto
Sé que al fin de cuentas, me tienes miedo…

Que te han contado, que tiemblas en mi presencia,
Que huyes de mi mirada, cual si fuera la muerte
Temes que acaso en tus ojos lea
Aquello que de mí tu corazón piensa,
Si es así, tarde ha huido tu vista
Para mí tu alma ya no guarda secretos,
Se lo que te han dicho, se a lo que temes
Y también se que sabes que ellos mienten…

Aún así tiemblas, estás insegura,
Comprendes que soy un manantial de aguas puras,
Pero tantas veces te han engañado tus sentidos,
Que ahora temes arriesgarte conmigo,
Está bien, no te acerques, no te obligo
Este es tu momento, tu tiempo
Mañana… mañana puede ser demasiado tarde
Porque sé que temes mirarme a los ojos…

Kevin Heves Maranetto Vranich

02/02/2012