La pasión…

Fuego frío que nos quema desde dentro,
Alarga las horas, hace insoportable el tiempo,
Y a la vez lo apresura, cuando juntos es el momento
Y uno quisiera unos instantes detenerlo
Hacer eternas las caricias, mas largos los besos
Y dejar que nos queme el pecho el deseo
Como si fueran llamas nacientes del infierno
Y son tan solo chispas de anhelo…

Hay… querer así es morir todo momento,
Aun en sus brazos, besando sus labios
Es tortuoso el saber, no por siempre tenerlos,
Y que eso minutos se van, las horas se escapan
Y acecha la despedida en un instante cualquiera,
Cual si uno por siempre vivirlo pudiera
Que enamorado, el mundo entero no entregaría
Por estar enredados en el suspiro de una vida…

Hay… querer así es un amar muy grande,
Tan colosal que el propio amar se desvanece
Y de las cenizas de este fuego que nos crece
Solo un querer gigante nos pertenece,
No me pidas mas, frágil y efímero amor,
Pues el amor profundo que te tengo yo
Es mil veces mil más fuerte que un millón,
Y es solo querer, el nombre que le doy…

Déjame robar tus besos, entrégame pasión,
Tengo sed de tus labios, de tu mirada necesidad,
Abrázame fuerte, fusiónate más,
Que somos unos en el calor de esta realidad,
Eclosión de pensamientos, frenesí alcanzado,
Los dos juntos, fundidos, enredados,
Bajo el sol, en cualquier sitio, recostados,
Conocimos el fuego frío que quema desde dentro…


Kevin Heves Maranetto Vranich

14/12/2008